El TDAH o trastorno por déficit de atención con o sin hiperactividad se caracteriza por una combinación de síntomas de inatención, hiperactividad e impulsividad en un grado disfuncional, explica Domingo Morales, que señala cómo provoca en los afectados problemas familiares, sociales, afectivos, académicos y laborales. Además, puede dar lugar a trastornos del comportamiento, del aprendizaje, ansiedad, humor y abuso de sustancias.
Ante lo que se les viene encima a los padres con niños diagnosticados de TDAH, la asociación almeriense se dedica a relajarlos, lo primero, a explicar bien el trastorno, que es genético en un alto porcentaje de los casos, y a que conozcan que el problema es biológico. “Muchos sentimos un cierto alivio al saber, por fin, qué les pasa a nuestros hijos”, reconoce Domingo Morales, que tranquiliza a otros padres explicándoles que existe medicación y también, “igual de importante, terapias conductuales que permitan a los niños centrarse en los estudios, además de otras cognitivas que le harán descubrirse como un ser inteligente para poder desarrollar sus cualidades al máximo”.
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